El continente y nuestro país podrían aprovechar todos los acuerdos que tienen para crecer más su relación y no depender totalmente de un solo “jugador” en el sistema económico mundial.
Las relaciones internacionales siempre van a mantener su importancia en el origen geopolítico y comercial, en este mundo donde la globalización obliga a las naciones a no permanecer aisladas, mantener una buena vecindad con los países colindantes y un comercio fructífero para sus connacionales.
Afortunadamente las relaciones entre las naciones han cambiado al existir un mayor, aunque no total, entendimiento cuando se crearon las organizaciones multilaterales como la Organización de las Naciones Unidas, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio, por mencionar algunas.
México tiene la oportunidad de expandir su comercio a otros mercados.
En este sentido, México ha sido líder en el comercio con varias naciones, tenemos bienes y servicios con gran demanda a nivel global; sin embargo, el país enfrenta retos importantes de los cuales se deben buscar mecanismos para incentivar el comercio con otras naciones, especialmente en sus exportaciones, y no sólo con Estados Unidos, su principal socio comercial, sino con otras naciones de todos los continentes.
De acuerdo con la Secretaría de Economía, la balanza comercial de México con el mundo ha sido negativa, sólo en el año 2019 y 2020 se han tenido superávits. Todavía no se encuentran los datos del año 2021 y posterior a la fecha de la redacción del presente.
México tiene un tratado comercial con la Unión Europea, llamado Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y México (TLCUEM), que entró en vigor el 1 de Julio del año 2000. Este acuerdo cumplirá 25 años de vigencia en 2025.
De 27 países que componen este bloque comercial europeo, en el año 2021 - último año en el que se tiene el registro en la página web de la Secretaría de Economía- los primeros cinco países del TLCUEM con los que México tuvo el mayor intercambio comercial, en orden descendente, fueron: Alemania (21,434.9 millones de dólares), España (7,541.1 MDD), Países Bajos (2,343.1 MDD), Bélgica (1,564.3 MDD) y Francia (1,380.7 MDD). Esto significó que Alemania fue el país receptor que más adquirió productos y servicios de México.
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La Unión Europa la componen 27 países.
Para tener como referencia, en esa misma fecha de 2021 el total de exportaciones hacia Estados Unidos fue de 398,989.3 MDD mientras que el total con los países del TLCUEM fue de 21,434.9 MDD. Es decir, En 2021, las exportaciones mexicanas al TLCUEM representaron aproximadamente el 5.37 % en comparación con lo exportado a Estados Unidos.
Con estos datos, aún cuando son de hace cuatro años, se aprecia la gran diferencia que existe entre lo que se exporta al vecino país del norte y lo que se exporta al conjunto de países que integran el TLCUEM.
Con las recientes políticas comerciales del gobierno de Estados Unidos respecto a la revisión del tratado comercial con México y Canadá, además de la imposición de aranceles a determinados bienes como el acero y el aluminio, entre otras medidas comerciales, queda en evidencia que México debe aprovechar más y mejor los tratados comerciales que tiene con otras naciones del mundo, en este caso, con los países de la Unión Europea.
Continuar fortaleciendo las alianzas con los países no sólo con sus principales socios comerciales como lo es Alemania, España y Países Bajos, sino con otras naciones que no se ha explorado activamente estas oportunidades comerciales, por ejemplo, Italia, Portugal, o con los países nórdicos, entre otros países de la región poco explorados para que proveedores y productores mexicanos tengan este potencial de incentivo exportador.
Esto no es sólo tarea del empresario mexicano, sino del gobierno estatal y federal quienes deben impulsar en primer lugar a sus sectores productivos, a sus respectivos estados en general y en México en particular. Con la visión de favorecer desde al pequeño proveedor como a las empresas más grandes, todos y cada uno son piezas claves para el desarrollo y crecimiento económico y comercial de este país.
Tener de vecino a Estados Unidos para la realización de nuestro comercio, es una ventaja, pero también un reto potencial, el mayor porcentaje de nuestras exportaciones las dirigimos a este mercado geográficamente natural, pero sus políticas unilaterales y cambiantes ponen en riesgo una parte del comercio del cual México depende para el ingreso de divisas por las ventas esperadas año con año.
Por lo tanto, es recomendable que cada gobernador incluya en su agenda fortalecer los vínculos comerciales con sus contrapartes de la Unión Europea, así como con naciones de otras partes del mundo. Literalmente, tanto el gobierno estatal, el federal y el sector empresarial deben “tomar sus maletas” para iniciar o fortalecer los vínculos comerciales, promoviendo los productos y servicios que cada uno tenga, considerando su capacidad de exportación.
De esta manera, los países socios de Europa no se conviertan lo que hasta ahora ha sido un comercio menor pero con muchas oportunidades. Por esto surge la pregunta de este ensayo, México y Europa, el comercio bilaterial, ¿cuándo comenzar de nuevo?. La respuesta es continuar y seguir trabajando para que no declinen los lazos políticos y comerciales con Europa, que, aunque geográficamente lejos de México, pero cercano en oportunidades e intereses comerciales, además de los culturales, académicos.
Es necesario que gobierno y empresarios trabajen para expandir los mercados.
Dr. José Alejandro Jaime Vargas
Académico, consultor e investigador del Departamento Académico de Ciencias Sociales, Económico y Administrativas de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG).
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