El egresado es un importante pilar e impulsor de la Patología Clínica y Medicina de Laboratorio en México.
El Dr. Guillermo José Santoscoy Tovar es un importante pilar e impulsor de la Patología Clínica y Medicina de Laboratorio en México, excelente esposo y admirable padre, lleno de bondad, honestidad y buenos valores que ha dejado marcada a la gente que le rodea.
Actualmente, es Director General de Unidad de Patología Clínica, función que ha desempeñado desde el año 2005.
“Tenemos un laboratorio robotizado que va muy de la mano con la medicina moderna, en donde se tiene que combinar la mente del médico con la parte clínica”, comentó.
Su gran pasión por la Patología Clínica lo ha llevado a ser miembro de múltiples Asociaciones y Sociedades a nivel nacional e internacional, de las cuales ha ocupado importantes puestos y funciones, como el ser Presidente del Consejo Mexicano de Patología Clínica y Medicina de Laboratorio COMPAC/ML del 2017 al 2021.
Además, es un promotor de la educación médica continua, ha participado activamente en los comités para la organización de múltiples congresos en México y en el extranjero, entre ellos el Congreso Mexicano de Patología Clínica y Medicina de Laboratorio y el XVII Congreso Mundial de Patología Clínica WASPaLM, por mencionar algunos.
Por otra parte, el Patólogo ha recibido muchos premios y reconocimientos a través de su empresa y por su trayectoria profesional, entre ellos el reconocimiento “Industrial Distinguido de la Sección de Laboratorios de Análisis Clínicos” por la Cámara de la Industria de la Transformación del Estado de Jalisco (CAREINTRA), así como el reconocimiento “PLAYERS OF LIFE GUADALAJARA” en marzo de 2018, el Galardón Empresarial 2022 “Mejor Empresa Tapatía”, por el Ayuntamiento de Guadalajara, entre otros.
-¿Cuáles fueron los principales desafíos a los que se enfrentó para estar en donde hoy se encuentra?
“El principal desafió que he tenido fue la pandemia, el COVID fue muy duro para nosotros porque tenemos una plantilla de 280 personas y no sabíamos qué hacer, el trabajo nos bajó 40 por ciento, entonces el reto fue no despedir a nadie y seguir manteniendo a todo el personal y buscar nuevas áreas de oportunidad, así que al final el COVID se volvió un área de oportunidad muy grande por los daños colaterales que dejaba y empezamos a procesar estudios nuevos en todo el país”.
“Otro ha sido el liderar una empresa en donde somos seis hermanos, donde el conciliar a los
5 a veces es difícil, el tomar decisiones y sopesar, pero siempre manteniendo la unidad de la familia para que esto siga adelante, el éxito de la empresa ha sido la familia”.
Asimismo, a través de su empresa familiar realizan labor social y trabajan de la mano con el Arzobispado de Guadalajara y con otras organizaciones religiosas para dar apoyo a los Hospitales Civiles, el Hospital General del Occidente y organizaciones que dan apoyo a los niños con cáncer, madres desamparadas, niños huérfanos y quien lo necesite.
Orgullo UAG
El UAG Alumni es originario de Guadalajara y nació el 7 de abril de 1956, cursó en la Preparatoria Varonil de la Universidad Autónoma de Guadalajara y, posteriormente, ingresó a la Facultad de Medicina de la Autónoma en el año de 1973.
-¿Por qué decidió estudiar Medicina?
“Mi papá fue médico, mi abuelo fue médico, mi bisabuelo fue médico. Entonces traemos tatuado el ser médicos, además que mi padre desde pequeño nos llevaba a trabajar en su laboratorio y ahí nos fue inculcando el amor por la medicina”.
-¿Cómo llegó a la Autónoma?
“Fue indudablemente por mi padre, porque él fue Director de la Facultad de Medicina de 1956 a 1965 y luego fundador del Instituto de Ciencias Biológicas (ICB) del 1968 a 1970, por lo que traigo el ser médico y el ser UAG”.
Cuenta que siempre fue extraordinario estudiante y con el tiempo su profesionalismo fue prueba de ello. En el año 2015 la UAG le hizo entrega del Galardón “Lic. Antonio Leaño Álvarez del Castillo” como egresado distinguido de esta casa de estudios y anteriormente fue miembro y consejero del Consejo Consultivo de la Facultad de Medicina.
Luego, lo que más recuerda en su paso por la UAG son los 1,200 alumnos de todo el mundo que eran cuando ingresó, una cantidad impresionante, los grupos eran por bloques y no todos se conocían más que de vista.
“Recuerdo mucho a un profesor que nos daba la materia de Farmacología, una materia muy dura, era el coco de los alumnos, no podíamos pasar a cuarto semestre de medicina si no pasábamos esa materia con el Dr. Humberto García Ulloa, quien era muy recto y duro y actualmente él y yo somos amigos y nos reunimos a jugar dominó”.
Por último, invitó a los estudiantes a que siempre se esfuercen, a que no se queden atrás, ya que vienen pasando por una época muy difícil de la pandemia, “se puede salir adelante, trabajen, estudien y van a ver que volando muy alto con alas bien abiertas como los tecolotes van a seguir adelante”, enfatizó.
Galería de fotos
Autoridades, estudiantes y colaboradores participaron en el recorrido y consagración.
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